RAQUEL GÓMEZ | 5 de abril, 2021 El entrevistado de hoy era uno de esos alumnos que nunca tuvieron claro a lo que querían dedicarse y al que los profesores siempre le insistieron en que, de seguir así, no iba a llegar a nada. Terminó sacándose la ESO y, tras ayudar a su padre en el negocio familiar y a su tío como albañil, Cley, el que es hoy todavía su jefe, le dio la oportunidad de explotar un dote que él desconocía. Adrián o Adrichan, como se llama en su cuenta de Instagram, lleva cinco años tatuando en un estudio del centro de Bilbao y a día de hoy es el único especializado en anime del bocho.